Taylor Swift y el Acuerdo que Nunca Sucedió con FTX

1. Introducción: El Escape Oportuno de Taylor Swift

En el dinámico mundo de las criptomonedas, un evento no concretado puede ser tan crucial como uno que sí sucede. Este fue el caso de la estrella pop Taylor Swift, quien estuvo en negociaciones para un acuerdo de patrocinio con FTX. Sin embargo, este acuerdo nunca llegó a materializarse. En retrospectiva, esta decisión resultó ser un movimiento astuto y afortunado, especialmente considerando los eventos posteriores relacionados con FTX.

Aunque existieron rumores de que Taylor había frenado el acuerdo por preocupaciones legales, la verdad es que el acuerdo no se dio por términos financieros. Mientras que otras celebridades como Tom Brady y Gisele Bündchen recibieron entre $18 y $30 millones de dólares por sus acuerdos de publicidad con FTX el equipo de Taylor Swift estaba buscando $100 millones de dólares en la negociación. Después de seis meses de pláticas el equipo de FTX decidió suspender las negociaciones, considerando que era demasiado caro firmar a la artista de pop.

2. El Colapso de FTX: Un Escenario Problemático

FTX, una vez una de las plataformas de intercambio de criptomonedas más prominentes y respetadas, se enfrentó a un colapso dramático. Este evento  sacudió el mercado de criptomonedas, y afectó a muchos fondos de inversión en el espacio -que habían invertido en FTX o le habian prestado dinero así como a todos los usuarios de la plataforma que quedaron con fondos dentro de la misma que ya no pueden sacar. 

El escándalo ha llevado a varios juicios y el reciente encarcelamiento del fundador de FTX: Sam Bankman Fried.

3. El Impacto en Otras Celebridades

Mientras Taylor Swift evitó involucrarse con FTX antes de su caída, otras celebridades no tuvieron tanta suerte. Varios famosos que habían firmado acuerdos con FTX se encontraron en el centro de controversias legales y de relaciones públicas tras el colapso de la plataforma. Entre ellos están  Tom Brady, Gisele Bündchen, Larry David y Shaquille O’Neal.

Este suceso salvó a Taylor Swift de los problemas que están enfrentando las otras celebridades asociadas a la marca. Se les acusa de defraudar a los clientes que perdieron su dinero en la plataforma. Más aún, los acuerdos de publicidad eran pagados en acciones de FTX, por lo que los involucrados ni siquiera pudieron obtener mayor beneficio de haber colaborado con el difunto exchange -cuyas acciones hoy no tienen ningún valor.